Cuanto aprendemos de nuestros alumnos!!!!
Poco a poco, la operación de recogida de alimentos va tomando forma en el Colegio.
Os contamos una bonita y sencilla historia que ha pasado hoy.
Al bajar al patio, un niño de la etapa de infantil, ha dejado sus alimentos en la porteria. Otro niño, al ver el gesto solidario de su amigo, ha preguntado para que era eso.
Marisa le ha explicado que los alimentos eran para los niños que no tenian posibilidad de comprarlos.
Entonces, nos ha dicho: "yo no he traido nada, asi que voy a dejar mi bolsa de chuches para los niños pobres". Y no lo ha dudado.
Marisa, ha hablado con él, y le ha explicado que es mejor que se coma las chuches y que mañana pueda traer algo de casa. Pero no ha sido tan facil convencerle de lo que le decia su corazón. Un corazón lleno de solidaridad.
Este niño nos ha dado que pensar. ¿Verdad?
Con el paso de los años, muchas veces, perdemos la sencillez de un niño. Muchas veces nos llenamos de "justificaciones" que frenan nuestra solidaridad.
Ojalá, que haya momentos en la vida, en los que sigamos siendo ...COMO NIÑOS.