ALGO MÁS QUE UN COLEGIO
El Colegio Hogar San José tiene
su origen en el nacimiento del barrio de Ariznavarra en el año 1960 y fue
impulsado por las Damas y 4 Hijas de la caridad de San Vicente de Paúl que
iniciaron su andadura a nivel educativo, social y sanitario.
El 19 de marzo de 1966 se
inauguraba el nuevo colegio por el entonces obispo D. Francisco Peralta en
presencia de numerosas autoridades.
Somos un centro concertado con
350 alumnos desde E. Infantil hasta Secundaria. Con una educación intercultural que valoramos como oportunidad
y enriquecimiento.
Entre nuestras preocupaciones estan las
necesidades que van surgiendo en el día a día, desde la acogida e integración
de los alumnos, hasta auparlos al nivel
de los demás mediante la educación integral y en valores.
Es un centro familiar donde se
trabaja por una mejora continua. Se Inició el camino hacia la excelencia en el
año 1999 consiguiendo la Q de Plata en el 2007 y la de Oro en el 2011 teniendo
como lema: “Saber más para servir mejor.”
El día 19, coincidiendo con el 50 aniversario de su inauguración, hemos querido revivir lo que supone tener ilusión por un proyecto que sigue siendo necesario.
GRACIAS A TODOS POR LO VIVIDO
Fue un día
cargado de encuentros, abrazos, recuerdos e ilusiones.
Muchísimos
antiguos alumnos se dieron cita en la tarde de la festividad de San Jose para
celebrar todo lo vivido en el Colegio.
Comenzamos con
la Eucaristía, presidida por nuestro Obispo D J Carlos Elizalde. Con el ejemplo
de San José nos felicitó por todo lo vivido y nos animó a no ser “copia” en la
vida, a no perder la “originalidad” que nos identifica.
Después de la
bonita Eucaristía, pasamos al patio del Colegio. Allí, Dña Pilar Salazar y Dña Nerea
Melgosa (representantes de la Diputación Foral y Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz),
tuvieron unas palabras llenas de emotividad y fuerza para todos. Nerea se apuntaba a todo lo que supone ser
vicenciano hoy, y nos subrayaba el deseo de que las instituciones también se
pudieran sumar a este deseo…”Ser seguidor de San Vicente de Paul”.
Antes de comenzar
con la mesa compartida, nuestro Obispo volvió a reproducir la bendición que
hace 50 años recibíamos de manos de D Francisco Peralta. Fue un momento cargado
de emoción.
AHORA NOS TOCA SEGUIR ...A POR LOS SIGUIENTES 50 AÑOS!!!!
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